La insalubridad del aire interior en una vivienda era hasta hace poco un problema prácticamente desconocido.
Las ventanas tradicionales, las de toda la vida, no ajustaban correctamente y el aire se filtraba con relativa facilidad. La circulación constante de aire aseguraba una renovación del aire, si bien a costa de una alta ineficiencia energética.
Con la crisis del petróleo de los 70 la preocupación en Europa por ahorrar en gasto energético conduce a la inversión y desarrollo de sistemas de cerramientos herméticos. Las nuevas ventanas ajustan y cierran mucho mejor; las fugas de calor desaparecen y finalmente se hace posible reducir el gasto de la factura energética.
Pero con la moda de lo hermético aparece un nuevo problema: el deterioro de la calidad del aire en la habitación. Al suprimirse la antigua ventilación natural, las ventanas pasan a empañarse; el exceso de humedad genera la aparición de moho, proliferan los hongos en las superficies orgánicas de la habitación (muebles, plantas, telas), los humos y olores se estancan en la habitación, el nivel de CO2 aumenta afectando el bienestar general del cuerpo, etc..
esporas de hongos aumentadas microscópicamente
Y entonces regresa la necesidad de ventilar la habitación. Las legislaciones europeas, incluida la española (Código Técnico de la Edificación – en su Documento Básico DB de Salubridad) obligan a que las ventanas y puertas dispongan de un sistema de ventilación que garantice la correcta circulación de aire fresco.
CORTIZO ha diseñado y homologado un sistema de aireación para el cumplimiento de las exigencias del CTE en materia de salubridad.
Este sistema se conoce como MICROVENTILACIÓN.
Se trata de un dispositivo aplicable a todo tipo de aperturas (practicables, oscilo-batientes y correderas) que se incorpora al herraje de la ventana y permite un cimbreo de la ventana de entre 6 a 8 milímetros. Con esta holgura de la ventana se produce una lenta y constante circulación de aire, pero al mismo tiempo la ventana se mantiene en posición de cierre, no siendo posible su apertura desde el exterior. Además el mecanismo de microventilación es regulable, permitiendo así variaciones en el caudal de ventilación.
Ventajas de la MICROVENTILACIÓN:
● Muy sencillo de usar
● Cumplimiento de la normativa DB-HS
● Menor coste que otros sistemas (tipo aireadores)
● Mecanismo oculto en el herraje, con lo que la estética de la ventana no se ve afectada
Todas las ventanas de CORTIZO que fabrica e instala FENSTER llevan incorporada la MICROVENTILACIÓN.